Todos estamos acostumbrados a usar el sistema operativo Linux para aplicaciones de servidor, sin entorno gráfico. Configuramos los servicios necesarios utilizando la consola SSH y trabajamos con el sistema operativo exclusivamente de esta manera.
El sistema operativo Linux también permite su uso como estación de trabajo al instalar una interfaz gráfica, ya sea KDE o Gnome a su elección: obtendrá una estación de trabajo completamente funcional a la que se puede conectar utilizando el protocolo RDP familiar, como con Windows.
Descripción de la configuración técnica y conexión al escritorio de Linux
Dependiendo de las tareas que asigne a la estación de trabajo, la interfaz gráfica del sistema operativo Linux ofrece capacidades exclusivas, como cualquier otro sistema operativo. También existen aplicaciones populares, como los navegadores Chrome y Edge, que se pueden instalar si es necesario.
A diferencia de Windows, Linux ofrece una gran cantidad de herramientas para trabajar con redes, diversas utilidades y scripts para crear un archivo de mapa del sitio (sitemap.xml), un script para verificar enlaces rotos y muchas otras herramientas útiles que funcionan en el sistema operativo Linux.
En conclusión, podemos señalar que una estación de trabajo Linux para trabajar con redes y sitios web ofrece mayores capacidades y comodidad en comparación con el sistema operativo Windows, que también tiene sus propios puntos fuertes, pero en un ámbito de tareas diferente.